Si quieres trascender la mera verborrea
de los votos de una boda y verdaderamente unirte con otra persona en luz
inseparable, puedes asistir a la AC Institute en Nueva York y casarte
cuánticamente. El artista y filósofo Jonathon Keats ofrece quizás la
unión más poética a la que podemos aspirar: unir partículas de luz de
forma tal que estas se comporten como una y la misma, comunicadas
instantánemante no obstante que estén a millones de años luz de
distancia en una especie de empatía cósmica. Pero la poesía de esto es
que no sólo es una metáfora, el entrelazamiento cuántico es un fenómeno
físico totalmente real que ha sido comprobado en el laboratorio,
conocido a veces como el “efecto de dios”.
El procedimiento ideado por Jonathon
Keats consiste en situar cristales no lineales entre la pareja que
quiere unir sus partículas y la luz del sol. Esto entrelaza los fotones
de esos rayos solares que los iluminan. Luego, por medio de prismas, se
separan los pares de fotones, mismos que transfieren sus propiedades
fotoeléctricas a cada uno de los sistemas cuánticos. Es decir, a cada
una de las personas que se unen. Esto significaría que, de manera
individual, poseerían partículas que son completamente idénticas y que
cambian si la otra lo hace, sin importar la distancia o el tiempo. Amor
más allá de la distancia, la luz como el vaso comunicante del erotismo.
Por otra parte el brillante proyecto de
Keats (un nombre con un enorme linaje poético) quizás sólo sea una
manifestación puntual de un fenómeno que ya ocurre. Es decir, una pareja
que realiza este experimento probablemente sólo esté reforzando su
unión cuántica de forma simbólica ya que cuando dos personas tienen
contacto íntimamente es probable que sus campos electromagnéticos entren
en estados de entrelazamiento cuántico, un fenómeno que tal vez pueda
explicar situaciones como la telepatía o el fenómeno de la mimetización
entre algunas parejas (a partir del campo de información colectiva que
se forma en el entrelazamiento cuántico, una especie de Dropbox).
Así que digamos que más que la boda, lo que une es la noche de bodas,
la luz de los cuerpos que al tocarse entretejen una telaraña de
estrellas invisibles.
Las bodas fotónicas se realizarán en el AC Institute, en Nueva York, del 12 de mayo al 18 de junio de este año.